martes, 6 de noviembre de 2012

LA NUTRICION Y LOS DIENTES




Una buena nutrición no es sólo necesaria para llevar una vida saludable, también juega un papel clave en el desarrollo y la protección de una buena salud dental. 
Una buena salud dental es parte de una vida saludable.
La salud dental es un elemento imprescindible para tener una vida saludable.
No es sólo tener dientes saludables o no tener enfermedades, significa tener dientes, encías y boca saludables, relajados y útiles.
La salud dental también facilita una buena nutrición.
LA IMPORTANCIA DE UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE:
 Los dientes de leche se empiezan a desarrollar durante el segundo mes de vida del embrión y se calcifican antes del nacimiento del bebé.
Los dientes permanentes se empiezan a calcificar justo antes del nacimiento del bebé y todas las coronas de los dientes permanentes, excepto las de las muelas del juicio, están formadas para cuando el niño tiene 8 años de edad.

• LAS PROTEÍNAS: Son importantes para la formación de los dientes.
La desnutrición causa un retraso significativo en la erupción de los dientes de leche.
Hay estudios que sugieren la existencia de una relación entre la desnutrición temprana y la aparición de caries (los dientes poco desarrollados y bajos en calcio son más vulnerables a las caries).
• EL CALCIO, LA VITAMINA D Y EL FLÚOR: Son necesarios para la formación de dientes fuertes durante el proceso de calcificación dental.
El CALCIO:
Es un elemento imprescindible en la formación de los huesos y los dientes.
El 99% del calcio existente en nuestro cuerpo se encuentra en ellos.
El 1% restante está en la sangre, en el líquido extracelular y en el tejido adiposo.
El calcio es necesario para la transmisión de los impulsos nerviosos, para la contracción muscular, para la coagulación de la sangre y para el funcionamiento del corazón y el mantenimiento de la presión arterial.
Además previene la formación de tumores de colon y la formación de cálculos renales.
Se recomienda una cantidad media de 1.200 mg de calcio al día.
Si no se ingiere una cantidad suficiente, el organismo se ve obligado a extraerlo de los huesos para asegurar este 1%.
El hueso que acusa antes la pérdida de calcio es la mandíbula (especialmente el hueso alveolar, que es el que soporta al diente).
Por ello, el diente pierde su soporte y aumenta su movilidad.
LA VITAMINA D:
Tiene una importante función en el mantenimiento de la salud ósea y dental.
Facilita la absorción de calcio y fósforo, los cuales son necesarios para tener huesos y dientes sanos, y para mantener en buen estado nuestro sistema nervioso.
Mantiene los niveles adecuados de calcio en sangre.
Dónde se encuentra:
La vitamina D la encontramos en el pescado, aceite de hígado de pescado, margarina, huevos, leche y productos lácteos.
Una parte de esta vitamina se forma en la piel por acción de los rayos solares, de ahí la importancia de exponernos al sol moderado, sobre todo los niños (están en época de formación dental y ósea) y los ancianos (disminuye la capacidad de absorción digestiva de la vitamina D aportada por los alimentos).
• LAS VITAMINAS C Y K:Son importantes porque mantienen las encías saludables.
La vitamina C mantiene fuerte el tejido de las encías y la vitamina K controla la pérdida de sangre.
La falta de vitamina C afecta las encías y el tejido blando que sujeta los dientes.
LA VITAMINA C:
Interviene en la formación de glóbulos rojos, favorece la absorción del hierro, aumenta la resistencia a las infecciones y tiene una acción antioxidante o antienvejecimiento.
Tiene un papel importante en el desarrollo y mantenimiento de la salud de dientes y encías. Interviene en la síntesis de colágeno de las encías y del resto del organismo.
El colágeno es necesario en la formación de la piel, músculos, vasos, órganos internos, etc. y su función es fundamental en los procesos de reparación y cicatrización de estos tejidos.
Además, interviene en la formación de cartílago, tendones, huesos y dientes, favoreciendo la adecuada formación de material osteoide y la función de los osteoblastos..
• LA VITAMINA A: Es una vitamina liposoluble fundamental para el buen estado de la piel y las mucosas e interviene en la función de la visión.
Es importante para el desarrollo del sistema nervioso y la formación de hormonas sexuales.
Además, interviene en la formación y desarrollo de los huesos y los dientes, previene las infecciones y tiene función antioxidante y anticancerígena.
Su déficit produce alteración de la estructura de huesos y dientes y resecamiento de las mucosas con lo que aumenta la predisposición a caries e infecciones.
• UNA FALTA DE RIBOFLABINA produce la inflamación de la lengua y la inflamación o el agrietado de los labios. Costumbres alimenticias que afectan la higiene dental
USO INADECUADO DEL BIBERÓN: En muchos casos, beber jugos u otras bebidas azucaradas, en lugar de agua, en biberón o taza causa caries infantiles. Esto puede ocurrir cuando se acuesta a los niños con el biberón o cuando usan el biberón o taza con frecuencia durante el día.
ALIMENTOS RICOS EN AZÚCAR O ALMIDÓN:
Aunque los niños y los adolescentes necesitan dietas que proporcionen mucha energía, esto no significa que deban tomar durante el día refrescos y meriendas que contengan grandes cantidades de azúcar.
Se ha relacionado la existencia de altos niveles de bacteria que causa caries con la consumición de alimentos ricos en azúcar o almidón (especialmente los alimentos pegajosos), caramelos duros, refrescos, jugos de frutas, galletas, pasteles, tartas y papas fritas en bolsa.
FRECUENCIA DE COMIDAS:
Además de una higiene dental deficiente, el factor más importante relacionado con las caries es la frecuencia de comidas.
Cuanto más frecuentes sean las comidas, mayor es el riesgo de tener caries.
Esto es debido a que comer a menudo fomenta el crecimiento de la bacteria bucal que a su vez aumenta el nivel de acidez en la cavidad bucal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario